domingo, 23 de diciembre de 2007

Dime lo que piensas y te diré lo que padeces (II)

Una forma de aliviar el estrés, que los animales han utilizado desde siempre, es pasárselo a otro. En el mundo humano moderno también lo observamos en todos los ámbitos, desde la familia, hasta el trabajo y los amigos.

Tomar conciencia del propio estrés, averiguar sus causas y gestionarlo sanamente sería entonces el primer paso para re-equilibrarse y evitar sobrecargar a otros. Esto pasaría por averiguar si lo que está provocando el estrés es evitable o no. Pensar continuamente en posibles amenazas o desastres sobre los que no tenemos control crea situaciones de emergencia interna, ansiedad o estrés que existen para resolver emergencias reales. "Más que en el resto de las especies, la respuesta de estrés del primate puede venir provocada no por un suceso concreto, sino por una mera prevención. Ante una apreciación certera ("estoy en una calle oscura y desierta; debo prepararme para correr"), una respuesta de estrés preventiva se adaptará muy bien a las cir­cunstancias. Pero cuando un primate, sea humano o no, cree crónica y erróneamente que está a punto de sufrir un daño, queda sometido a la neurosis, la ansiedad y la paranoia", dice Robert Sapolsky.

Si la solución del problema no depende de uno mismo todo el proceso que se desencadena en el cuerpo es un desgaste inútil. "El corazón late como loco porque el cuerpo se moviliza para crear la energía necesaria y pasar a la acción al tiempo que se detienen todos los procesos no esenciales" indica este neurólogo.

La naturaleza decide dejar para otro momento más propicio la ovulación, la creación de esperma, el crecimiento o cualquier otro proyecto a largo plazo; lo importante es salir del estado de emergencia. "Llegar a la pubertad se deja para otro día, dice Sapolsky, no hay que pensar en crecer, la digestión puede esperar, los anticuerpos ya se crearán esta noche...si es que se llega a la noche" y ha pasado la situación de peligro, que no olvidemos sobrevino a través del pensamiento y no, por ejemplo, porque nos sentimos amenazados por un grupo de jóvenes violentos o viéramos peligrar nuestro patrimonio. "Somos unos primates muy sofisticados psicológicamente, y podemos generar la misma respuesta de estrés simplemente al pensar, al crear un estado psicológico".

¿Pero qué acción es la que se requiere cuando nos sentimos amenazados y nos asusta o nos indigna lo que sucede a nuestro alrededor? A veces ninguna que podamos tomar individualmente. Las cosas del mundo siguen girando y parece que nos han dejado fuera, solo con la posibilidad de pensar en ello.

Cuando creemos que no podemos hacer nada, que la situación está fuera de nuestro alcance por un motivo u otro pero seguimos pensando en situaciones límite, tomaremos el camino más primario dice Sapolsky: "hacer que alguien se estrese y que se sienta mal: desplazar la agresión al otro".

"Una de las mejores cosas que puede hacer un animal estresado para reducir la ansiedad –somos animales racionales pero lo hacemos igual que los irracionales- es hacer que alguien se estrese y se sienta mal", desplazando la agresividad que sentimos hacia otros. "Esto está muy bien documentado, desgraciadamente es una repuesta para soportar el estrés, y es una respuesta que hace que el mundo sea mucho peor. Mucha gente evita tener úlceras haciendo que otros las tengan".

Las circunstancias en las que vivimos nos afectan individualmente. Por ejemplo, dice Sapolsky, "En cuanto hay un periodo de recesión económica, hay un incremento del abuso a menores, hay más violencia de género, hay más “estoy de mal humor, estoy estresado, tengo que encontrar a alguien más pequeño que yo a quien pasárselo”. Desgraciadamente esto es algo muy típico de los primates".

Próximo post: Síntomas y enfermedades del estrés
recibir actualizaciones por correo electrónico

2 comentarios:

Toupeira dijo...

El estres será uno de los problemas más graves del universo en un futuro proximo desde mi punto de vista. La salud mental de la sociedad sctual esta empeorando de una manera exponencial.

Gracias por tu visita y tu comentaio en mi blog.

Maria dijo...

Comparto tu opinión Toupeiro, vivimos en un mundo rrraro, rrraro, rrraro, pero como no hay otro yo me apunto a minimizar lo negativo y maximizar lo positivo que tiene, que tampoco es poco y visitando tu blog me lo paso estupendamente.